martes, 28 de abril de 2009

El signo de los cuatro, Conan Doyle

Holmes y Watson ayudan a una joven en apuros (Watson se casa después con ella). Buen libro, entretenido, en general los libros de S.Holmes lo son. Watson también parece persona en éste, parece que el único donde se le nota realmente canino es en "Baskerville".

Es raro que a Holmes le guste Goethe, no cuadra con su visión instrumental del conocimiento. En este libro también se ve la faceta drogadicta de Holmes.

Bueno.

Línea de sombra, Joseph Conrad

Leído en poco tiempo y con poca concentración además. Debo decir que Conrad me gusta mucho, especialmente "El agente secreto".

Línea de sombra es el relato de un oficial marino joven al que se le da la oportunidad de ser capitán de un barco en forma inesperada. El personaje de contrapunto es el segundo, Mr. Burns que le empieza a contar del extraño capitán anterior (muerto). Este fantasma ensombrece toda la historia.

Está en Singapur (creo) y no puede zarpar por la falta de viento, sus hombres caen con fiebre, pero al final logra zarpar, con más ánimo que viento. Una vez en la costa, el barco casi ni se mueve y los hombres siguen cayendo enfermos.

El libro da la idea de que el tiempo se detiene, el barco no avanza y parece que el tiempo tampoco avanzara.

Me gustó, aunque debo decir que a mí cualquier libro marino me gusta.

domingo, 19 de abril de 2009

Estudio en Escarlata, Arthur Conan Doyle

Esta es la primera aventura de Holmes y Watson. Watson llega herido y enfermo de la guerra de Afganistán (ya se usaba en esos días) y arrienda una casa a medias con el excéntrico Holmes.

El caso empieza con la muerte del norteamericano Debber, y el inspector Lestrade acude a Holmes. Watson se va integrando poco a poco al caso mientras Holmes hace gala de su prodigiosa capacidad adivinatoria.

Algo muy curioso de este libro es la idea de Holmes de no saber cosas inútiles, para él, la mente tiene un espacio limitado y él sólo quiere saber aquello que le sirve directamente para su trabajo. Es así por ejemplo que no sabe ni le interesa saber que la tierra gira en torno al sol. En conjunto esta idea me parece bastante ridícula, pero al menos es divertida.

En este libro Watson es mucho más persona y menos mascota.

Excelente libro a mi juicio.